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| la nomenklatura |
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Rehenes de la política Oscar Huerta |
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La guerra que protagoniza el gobierno federal del presidente Fox y el PAN contra Andrés Manuel López Obrador está llegando a extremos alarmantes. La ofensiva ha rebasado los límites personales y de partido como anteriormente fuimos testigos, ahora los ciudadanos estamos siendo usados en el juego del poder. En el caso de la reforma al artículo 122 constitucional promovido desde el PAN que ya se aprobó en la Cámara de Diputados, originó la toma de la tribuna por asambleístas y diputados del PRD. En este episodio nadie sale bien librado, muy por el contrario todos los actores resultan perdiendo. 1. El PAN promueve la reforma al artículo 122 con pleno conocimiento que tendrá un impacto significativo en las finanzas del gobierno del Distrito Federal. Este movimiento por supuesto que tiene por objeto debilitar la imagen de Andrés Manuel López Obrador al cancelar la posibilidad de que el gobierno que encabeza siga destinando recursos a la obra social, que luce y que da votos. No es casualidad que el golpe venga precisamente a gasto destinado a educación. 2. Sin seguir los procedimientos normales de discusión en la Cámara, el PAN y el PRI procedieron a votar la ley para su inmediata aprobación. Estos partidos argumentan que debe haber equidad en la distribución y aplicación de recursos en la educación, sin embargo nunca en el pasado se habían preocupado por hacerlo, sino hasta hoy donde está ubicado el más peligroso rival en la contienda a la presidencia. Este tipo de cambios que implican impactos por cientos de millones de pesos deben hacerse gradualmente, lo que no ocurre en el caso del 122 constitucional. No hay duda que los principales afectados por este recorte serán los capitalinos. 3. Mucho se criticó la violenta toma de la tribuna que realizó el PRD. Pero hubo igual violencia del PRI y el PRD al llevar el punto a la Cámara donde sabían que por mayoría se lograría su aprobación e inmediato impacto negativo en las finanzas del gobierno del D.F. Usar la fuerza en las Cámaras es igualmente violento que el uso de la fuerza en las calles. Tengo que decir que encuentro sumamente violento el gobierno de Vicente Fox y sus acciones secundadas por el PAN. Más allá de la entendible guerra que se libra por la presidencia en el 2006, al no tener los frutos que esperaban están haciendo todo lo posible por desestabilizar al gobierno y también a los ciudadanos del D.F. Un gobierno perredista incuestionablemente elegido por el voto. Violento porque están poniendo en riesgo la paz social, no estoy exagerando. Supongamos que logran sacar a López Obrador de la carrera presidencial, dejarán al D.F. lastimado y lo pagarán a un alto costo, recordemos el episodio donde el gobierno federal quiso construir un nuevo aeropuerto y perdió con la fuerza de los machetes de Atenco. De igual manera las expresiones de rechazo subirán de tono porque la gente se sabe víctima de las desmedidas ambiciones de poder de los políticos. Nadie ha resultado más radical en sus acciones que el PAN y Fox. La política dejó de ser un asunto de diálogo y de votos, se está convirtiendo en un negocio regido por la fuerza. Si la fuerza del PAN se aplica para tomar decisiones y para legislar, entonces encuentro muy normal la respuesta violenta de la minoría del PRD. No la justifico, pero cuando vemos la risa burlona de Barrio y de Chauyfett, la entiendo perfectamente, finalmente es política. Describo brevemente al presidente Fox: incapaz, inculto, torpe. No podemos esperar que una persona con estas características pueda ser un líder político para el país o para su partido. Sin embargo Andrés Manuel López Obrador no ha mostrado ser el líder que quiere ser en la presidencia. ¿Estuvo enterado de la inminente toma de la cámara? En cualquier caso López Obrador debió haber llamado al orden a su partido. Es indiscutible lo injusto que resulta el cambio promovido al artículo 122, pero alguien tiene que demostrar civilidad. Si se concretara tal reforma y los ciudadanos son afectados, el gobierno del D.F: tiene que salir a explicar cómo ha sucedido, pero debe dejar de recurrir a la fuerza. Es una lucha desigual, el PRI y el PAN están podridos de corrupción, pero no por eso el resto de los actores políticos deben serlo. Hace varios meses charlaba con colegas de la revista y les dije que el mayor obstáculo de López Obrador era el mismo PRD, que si quería ser presidente debería salir de él y hacer su propio partido. Efectivamente la corrupción y la intransigencia del partido ha llevado a López Obrador a un callejón sin salida, con esto el duelo de fuerza que promueven el PRI y el PAN está dando un gran resultado. Andrés Manuel debe renunciar de inmediato para saber cuál será el destino del juicio que se sigue en su contra, y eventualmente deberá resolverlo. Tanta incertidumbre no es sana para el país, no espero civilidad ni decisiones inteligentes del PRI o del PAN, espero que sea López Obrador y el PRD quienes valientemente y a costa de algunos de sus miembros corruptos quienes hagan una verdadera diferencia en el rumbo político. Los analistas políticos e intelectuales en su mayoría no han cooperado para orientar a la ciudadanía a llevar a juicio a los partidos. Tal parece que se conforman con condenar y "preocuparse" de los temas de la vida nacional, pero me resultan cobardes por no condenar claramente lo que ellos saben que está muy mal y sin embargo hablar en un tono "políticamente correcto" y así cuidar sus espacios en la prensa y en la televisión. Como con los partidos, los entiendo pero no los justifico.  |