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Como te decía, Flaco, sólo es cuestión de tiempo que el Senador me
llame...claro, el que fue candidato a presidente en las últimas elecciones;
entró segundo en el país, pero en el Departamento votamos bien, y eso fue
en gran parte gracias a mí. Y... es que yo conozco a medio mundo acá. ¿Cuántos
votos le arrimé? Cientos y cientos. Es que cuando la gente se enteró que
yo apoyaba al Senador, ¡paa! Ahí se dieron vuelta muchos caudillitos y
nosotros metimos dos diputados. Yo no pedía nada para mí, aunque el Senador
me ofreció encabezar una de las listas al Parlamento, pero yo le dije:
"poneme en un lugar simbólico", sólo para que la gente supiera
que yo lo apoyaba.
Lo que pasa es que todos saben bien quién es Gerardo Zullueta. Entre
otras cosas, ex secretario de Deportes del Intendente Carballo, un fenómeno
Carballito. Eramos muy amigos desde el liceo, y por eso me llamó, inmediatamente
de asumir...
Y ahí me mandé una gestión notable, hasta ahora la gente se acuerda.
Pensá nomás en los campeonatos de verano en el Campus, con los cuatro grandes
de Uruguay y Argentina.
Bueno, los inventé yo, claro, ¿quién si no? Y como siempre, tuve
que organizar todo yo, porque con los funcionarios no se puede contar.
Tuve que cranearla, mover muchos hilos, chamuyar muy fino, ¿eh? Pero para
un tipo como yo, no hay imposibles. Empecé haciéndole una llamadita a Víctor
Hugo Morales y el Guapo -sí, le decíamos así en el secundario, jugábamos
al basquet y él se agarraba a las piñas con los rivales- bueno, como te
decía, Victor Hugo enseguida habló con los dirigentes de Boca y River,
y los convenció para que vinieran a jugar con Nacional y Peñarol. Y a los
equipos uruguayos también los traje yo. Lo que pasa es que conocía, ¿que
digo?, conozco, al Contador Achar y al Dr. Sanguinetti, de cuando vivía
en Montevideo y era creativo de aquella agencia, yo era dibujante de la
JPK ADVERTISEMENT, una de las principales agencias publicitarias del país.
Y le armé la campaña al Contador para las elecciones del club y a Sanguinetti,
le hice el jingle de la campaña presidencial del 84, nada menos. ¡¿qué
te parece?!
Y el campeonato de verano fue un éxito tremendo de público, el estadio
recién se inauguraba. Si bien lo empezaron los milicos, la idea fue mía,
toda mía, che. Yo conocía al Coronel Curutchet, el que era Intendente;
yo entonces trabajaba en la Automotora Cono Sur, él era cliente nuestro.
Entonces le dije, Coronel: ¿por qué no hace construir un gran estadio en
el predio que hay entre la Rambla y el Río, es un lugar excepcional. Y
el tipo me dijo:. ¿Sabe que es una excelente idea, Zulueta?. Se lo voy
a proponer a mi amigo, el General Bermúdez, que es Ministro de Obras Públicas...
Y ahí tenés, un par de años después, me toca a mi como Secretario de Deportes
de la nueva intendencia, inaugurar el primer estadio del Interior con pista
de atletismo olímpica y cancha de fútbol con medidas internacionales...
Así, que como te decía, Flaco, en cualquier momento me llama el Senador
y me lleva de Secretario, o el Intendente, que no sabe qué diablos hacer
con Deportes ...Es cuestión de tiempo nomás...
- Disculpe señor, dijo la enfermera
-que se había acercado por el corredor del pabellón sin que la notáramos-
pero el horario de visita ha terminado....
- Claro, entiendo, señorita-
dije levantándome de la silla.
- ¿Nos vemos, no? - preguntó
mi amigo, lanzándome una mirada suplicante.
- Claro, Gerardo. Portate bien
acá, ¿eh?
Nos dimos un abrazo y él se fue por el corredor en penumbras con
la enfermera. Escuché que seguía gesticulando y hablándole. La mujer sólo
asentía con la cabeza. Caminé en dirección opuesta, buscando la salida.
Necesitaba andar por la calle, mirar nubes, respirar aire fresco...
Una luz anaranjada se filtraba por los vidrios astillados de los
ventanales que daban al patio donde se alzaban dos viejas palmeras; las
malezas tapaban los canteros donde antes crecieran flores. Las sombras
de la noche comenzaban a envolver la mole gris del Hospital Psiquiátrico. |
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